jueves, 29 de enero de 2009

SUERTE

Cuando empecé a trabajar en Lacoste, descubrí una libretita en la que quien pasaba por la tienda escribía lo que le daba la gana. A mí eso me vino bastante bien y empecé a escribir cosas (al principio un poco raras, como el Cubo de Metatrón) y, luego ya, historias, preferentemente.

Esta que dejo aquí hoy es una de las primeras, sino la primera del todo. Iré copiándomelas y las publicaré aquí poco a poco, que a lo tonto son ya unas cuantas...

"Anclada al suelo con unas raíces negras de decepción y fracaso, la única actividad que podía llegar a desear era lo imposible. Sentada en el rincón, entre dos muros que se le venían encima, la única voz que supe interpretar eran el color y el brillo de sus ojos. Esas dos estrellas, años atrás, parecían ya pozos oscurecidos y anegados.

Seguimos sin hablar durante los escasos segundos que duró nuestra relación, pero sobraron las palabras en un tiempo que no hacía ninguna falta tener. Un simple “gracias” fue la única referencia del timbre de su voz. Lentamente, mientras el instante se acercaba al final, me fui dando cuenta de todo: de que lo que hasta entonces yo había conocido y aquello ajeno a mi propia cultura (y estatus, incluso) se fundían en uno solo. Así, comprendí el alcance de la tremenda escala de grises en que se mueve la humanidad.

Cuando, por fin, la moneda llegó al suelo, sólo me atreví a decir “suerte”, pues nada más en el mundo le sería útil a quien me miraba desde abajo con una sonrisa que demostraba más la desgracia acumulada que la alegría por ese mísero regalo."

lunes, 26 de enero de 2009

LA TELE CULTURIZA

No sé si será una frase célebre de esas que circulan por ahí o sólo es que ya lo he pensado muchas veces, pero la televisión, culturiza. Es encenderla y ¡me entran unas ganas de apagarla y ponerme a leer...!

Cosa más mala de programación...

CONEJOS A 6.000€

Cada vez hay más gente que necesita algo para poder vivir. Los subsidios y pagas no llegan ya al final de mes de muchas personas y se tienen que buscar la vida de cualquier forma, porque lo que los políticos les asignan es, simplemente, insuficiente. Es más necesario invertir en comidas, cenas, viajes, fiestas, certámenes (que son una suma de todo lo anterior, muchas veces) y cualquier cosa en la que gastar algo de dinero sea, cuando menos, cuestionable. Pero, vamos, que es sólo mi pinión, como siempre...

Cuando alguien tiene que alimentar a su familia, no encuentra trabajo y la pensión que le toque no llega para nada, ¿qué hace? Pues intentar salir al campo a coger algún conejo no parece una idea muy descabellada. Ahora que, por cada conejo cazado así son 6.000 euros de multa. Y da igual si lo haces por necesidad o por dinero, son seis mil euros. Si no, que se lo cuenten a este gaditano al que le han puesto una multa de 24.000 euros por cazar cuato conejos.

Yo creo que las leyes están para ser interpretadas y que, para eso, hay jueces y demás. Pero parece que no, que las leyes son normas inquebrantables e inflexibles que han de cumplirse a rajatabla, así vaya la vida en ello. Las leyes son leyes; las personas, justas o injustas.

Tengo mis opiniones y creo que las cosas tienen que ser de cierta forma, pero cada vez me siento mucho más sólo en una sociedad que ignora lo importante para centrarse en lo más vanal. Es mucho más importante la iluminación de Navidad, por ejemplo, que dar de comer a todos aquellos que podrían haber recibido ese dinero.

viernes, 23 de enero de 2009

PODER DE DECISIÓN

Lo que nos mueve en la vida son las decisiones. 
Si no decidimos, nos paramos y, si paramos, morimos.

miércoles, 21 de enero de 2009

ALGO BONITO

Me apatecía poner hoy una fotografía bonita aquí (por poner algo bonito, simplemente), así que he rebuscado entre mis fotos a ver qué tenía y he encontrado una perdida por ahí. Es una florecita en el pantano de Tibi, simplemente.

COMPRAR DENTRO

Hoy he oido al ministro Miguel Sebastián por la radio cuando decía que hay que comprar, y consumir en general, productos españoles. Esto ayuda a la economía del país para que el dinero circule dentro de España y crezcamos en ese sentido. Yo estoy muy de acuerdo en que hay que hacerlo así.

Ha dicho, por ejemplo, que a la hora de irse de viaje, es mejor elegir destinos interiores en lugar de irse fuera, ir por ejemplo a esquiar a Sierra Nevada en lugar de ir a los Alpes. Bueno, no creo que dónde ir a esquiar sea un problema para la mayoría en estos momentos.

Como digo, estoy de acuerdo con esas medidas, pero también hay otros factores que hay que contemplar y que, hace poquito, me dejaron bien claros: hay que poder permitírselo. Uno nunca piensa en todas las facetas de un problema; está bien que haya alguien para recordarle que la realidad es más amplia que las miras.

Eso de que hay que poder permitirse gastar el dinero en "producto español" no significa otra cosa que, en muchas ocasiones, los productos de fuera son mucho más baratos que los nacionales y, conforme están las economías domésticas (las más improtantes, según creo), a mucha gente le gustaría comprar algo fabricado en España antes que el mismo producto made in China, por decir un país. Aunque ahora China ya manda a fabricar a países con mano de obra aún más barata...

Por ejemplo, yo estuve en Dublín hace un par de semanas. El billete de avión me costó, entre ida, vuelta, tasas y todo lo que haya que incluir, solamente 55 euros. Si, en lugar de elegir Irlanda como destino, me hubiese ido a Barcelona, donde podría haber visto a un par de amigas que viven allí a las que tenía ganas de ver, ese avión me hubiese costado nada menos que 150€. Y no lo digo por decir, que este verano fui y me salió por eso. Puedo decir que, en el viaje de tres días a Barcelona que hice en Agosto me gasté el mismo dinero que dos personas en Dublín. Me hubiese gustado repetir destino, porque Barcelona me parece, además, mucho más interesante que la capital Irlandesa; pero hay que podérselo permitir.

Así que, está bien decir que hay que gastar el dinero dentro del país para favorecer nuestra economía, pero resulta que, en gran cantidad de situaciones, sale mucho más barato comprar fuera. No es que la gente quiera hacerlo, es que no queda otra opción.

Puede que quienes aconsejan no tengan a nadie que les haga ver toda la realidad, aunque creo que deberían. Quizá lo que deberían hacer es que nos resulte, efectivamente, mucho más aconsejable consumir lo que nosotros mismos producimos.

domingo, 18 de enero de 2009

¿MORIMOS, NOS MATAN, NOS SUICIDAMOS?

El título de la entrada es un poco extraño, pero en realidad voy a escribir unas cosas sobre un e-mail que me llegó el otro día.

Este e-mail, en un principio, me pareció uno de esos escritos alarmistas que buscan cualquier resquicio de probabilidad, por baja que sea, para decir proclamar al mundo los resultados de una investigación (muy parcial, por cierto) sobre cómo las grandes empresas, los gobiernos y todos aquellos que deberían velar por nuestra salud, se saltan las normas a la torera. Con eso, estoy bastante de acuerdo, si no, hubiese dejado de leer por tendencioso.

El asunto es que la Coca-Cola Zero, incluye supuestamente (no he mirado ninguna lata) un aditivo artificial llamado "ciclamato" (E952), un edulcorante que no engorda y que es hasta cincuenta veces más dulce que otros aditivos del mismo tipo. Como decía el e-mail, efectivamente está prohibido su uso en Estados Unidos según regulaciones de la FDA. Sin embargo, este ingrediente está avalado por otras muchas instituciones, como la FAO o la OMS.

Este dato es lo que me hace desconfiar del e-mail porque, aunque estoy completamente de acuerdo en que nos meten productos nocivos en el cuerpo sin que nos enteremos y, probablemente, sin que ellos lo sepan tampoco, que dé solamente información en contra y no refleje los dos lados de esa realidad me hace desconfiar y le quita mucho peso.

Decía en el e-mail que el ciclamato de sodio lo utiliza Coca-Cola en los países del tercer mundo, que no dicen ni pío; resulta, sin embargo, que su uso es regular en gran cantidad de países y hay recomendaciones acerca de la cantidad diaria recomendada y segura. Según el enlace a la Wikipedia que he dado antes, sería seguro ingerir once miligramos de ciclamato por cada kilo de peso corporal y día. Si peso 75 kilos, entonces podría tomar 825 miligramos de ciclamato al día. La Coca-Cola Zero, dice el e-mail, contiene esto:

"Mientras que la ZERO tiene *Ciclamato de Sodio ** (27mg%), Acesulfame K (15mg%) y Aspartamo (12 mg%)* haciéndola más dulce que la otra [la Light] (en total 54mg/100% de bebida)."

Como no entiendo muy bien qué tipo de unidades utiliza el abogado que ha redactado el e-mail, le he preguntado a mi hermano, que es biólogo y está acostumbrado a eso, y me ha dicho lo que pensaba: que tendría que poner "27 mg./100 ml." (27 miligramos de aditivo por cada 100 mililitros de bebida) y que si hay unidades, no es porcentual.

Esto lo digo porque he intentado hacer los cálculo de cuántas latas de bebida podría tomar en un día sin tener riesgo de cáncer. Repito que no dudo de las propiedades nocivas del ciclamato, pero es que así no me puedo fiar tampoco del e-mail. No se puede calcular bien, vamos, pero suponiendo que fuesen 27 mg. de E-952 por cada 100 mililitros de bebida, (89,1 mg/lata) una persona de 75 kilos podría tomar unas 9 latas de refresco (825/89,1=9,25). Si está bien interpretado.

En conclusión, no me fío de lo que dice el texto que me ha llegado, pero tampoco desconfío del todo. La sensación, al final, es la que siempre tengo cuando me entero de cosas así: que depende de quién te lo cuente, de dónde lo leas o de lo que quieras pensar.

Europa ha sido productor de alimentos transgénicos,, por ejemplo, y está demostrado que tienen efectos muy perjudiciales en la salud, tanto de personas como de animales; pero se han utilizado durante mucho tiempo sin problemas (sin problemas legales, digo). La razón era que las plantas con la genética modificada eran mucho más resistentes a pesticidas y plagas, además, producen muchísimo más; esto se traduce en menos dinero invertido y más ganado. En eso estoy de acuerdo con el abogado del e-mail: todo funciona por dinero.

Y, después de leer esto, cada uno que mire e investigue un poco por ahí para tomar sus decisiones. Yo, por si acaso, no tomaré esa bebida. De todas formas, a saber qué es lo que le damos a nuestro organismo al tomar otros muchos alimentos que llevan gran cantidad de ingredientes que no son más que letras y numeritos.

Intentemos lo que intentemos, tomando o dejando de tomar ciertas cosas, yo tengo la impresión (y no creo que sólo sea eso) de que la única forma de saber que no nos provocamos ningún daño de este tipo sería tener una huerta en casa y cultivar nuestros propias verduras y hortalizas, criar algunos animales de granja y, en definitiva, vivir aislados de la sociedad actual.

Sea como sea, cada vez estoy más convencido de que lo único que queda es esperar a ver lo que sucede y cómo aparecen más enfermedades nuevas y tan destructivas como el cáncer. El precio de una evolución descontrolada y antinatural (no sostenible, que es como lo llaman) lo pagamos de muchas formas, no sólo con contaminación, lluvias ácidas, extinción de especies y desastres naturales.

LA NOCHE DE LAS BESTIAS

Normalmente me da por escribir en prosa, pero de vez en cuando sí que se me ocurre alguna cosilla en verso. No tengo ni idea de poesía, pero igual eso me hace escribir lo que quiero sin pararme a pensar en si está bien, mal o tiene algo de correcto.

Así que, nada, aquí dejo un texto más bien oscuro (o bastante, depende de cómo se entienda) que puede significar una cosa o todo lo contrario: La noche de las bestias.

El reino de la luz se muere

y todo lo que nace bajo el Sol es yermo.
Las sombras se violentan
y destrozan los sonidos. Silencio.
Sólo observo la negrura
y desangro a dentelladas lo que puedo,
que, sin alma, aire y pausas,
queda libre y campa sordo el miedo.
Me escucho y me embeleso
en ese grito congelado desde páramos desiertos.
¿Y la brisa? Ha parado;
avanzo asesino a devorar lo que me encuentro.
En el fondo y ante todo,
descerrajo un corazón que clama muerto
por un segundo de paz,
por dejar de sufrir la tortura del pensamiento.

domingo, 11 de enero de 2009

UNAS GOTAS

Hay una cosa que está bien saber de los quemadores de esencias: si, por lo que sea, una gotita de aceite llega a quedarse en el borde del quemador, revienta. Y esto coonlleva un salpicón que me ha sorprendido porque lo ha puesto todo perdido. Vale que tenái que haber limpiado el quemador, porque qué de gotitas negras...

En fin, por lo menos he sacado de esto una foto:

UN EJEMPLO DE...

En una entrada de hace tiempo, de esa mini-sección del blog llamada "Cosas que me gustarían..." y que hace tiempo que no pienso nada, dije que me gustaría que los políticos fuesen personas antes que políticos.

No me esperaba que este año iba a empezar con un deseo así cumplido, pero un concejal del municipio de Arenys de Mar ha donado la mitad de su asignación por el cargo a cáritas. Lluís Blanchar ha tenido un gesto que debería hacer pensar a todos sus colegas. En unos momentos como los que estamos viviendo, muchos políticos tienen unos sueldos exagerados y eso no es nada justo ni moral.

Y eso, la moralidad, es lo que parecía faltar en gran medida en la clase política. Sirva o no, el ejemplo de este hombre está claro y es algo que se debería seguir. Los altos cargos requieren a gente con responsabilidad; parece que hay esperenzas de que aparezcan personas así.

viernes, 9 de enero de 2009

TIMAR AL SOLDADO RYAN

Lo que mueve a una empresa siempre es ganar más dinero; es comprensible porque sirven para eso, en principio. Para ello, muchas veces o casi siempre, hacen cualquier cosa y existen las estrategias más enrevesadas y pensadas para que la gente quiera comprar lo que tú vendes. A mí, personalmente, me atrae bastante esta faceta empresarial porque tiene mucho de psicología y de influir en los demás. Me parece muy interesante eso de meterse en la mente del consumidor, de conocer sus necesidades y de saber atraerlo para cumplirlas. Luego se crean necesidades que antes no existían, que es otro tema y no sé yo si muy ético...

El caso es que, para que la empresa gane dinero, me parece importante que el cliente tenga una buena opinión de la empresa porque, de lo contrario, igual no vuelve: "¡Una y no más, Santo Tomás!". Y es que, si le gastas una mala pasada al cliente o a éste le parece que lo estás haciendo, ya te puedes despedir de que vuelva. Y no sólo eso, sino que cada cliente insatisfecho hará publicidad negativa de esos que "le han engañado". No importa si se le engaña o no, lo que cuenta es lo que esa persona sienta. Por millones que se gasten en campañas publicitarias, siempre contará más la opinión de quienes tienes cerca que lo que diga un anuncio publicitario.

Pero hay empresas que parecen no darse cuenta; si se dan cuenta, habrá que pensar seriamente en la profesionalidad de quienes la dirigen.

Todo esto viene porque la semana pasada estuve en Dublín, como ya dije hace un par de entradas. El billete de avión lo saqué con una de esas empresas de bajo coste. Vale que "bajo coste" signifique que hay comodidades que no vas a disfrutar como tener un asiento concreto reservado, no tener que pagar al facturar las maletas o que te sirvan comida gratis en el avión. Una cosa muy distinta es que, tras comprar el billete y mandarte la empresa un e-mail bíblico (por lo extenso) en que te explican algunas condiciones y te intentan vender complementos y servicios suplementarios, haya cosas que no estén claras.

Yo compré el billete en una web de esas que buscan vuelos en todas las líneas aéreas para que encuentres el que mejor te vaya; Atrápalo, concretamente, con la que estoy bien satisfecho. Los vuelos eran de la compañía esa que empieza por Ryan y costaban alrededor de 25 euros cada billete (25€ ida, 25€ vuelta). Me leí el e-mail pastos ese que mandaron y vi que había un párrafo que hacía referencia a facturar en línea (check-in on-line) y que decía que, si se hacía por internet, ahorraba tiempo en el aeropuerto porque no tenía que acercarme al mostrador de facturación (con las consiguientes cola y espera) y así ir directamente a la puerta de embarque. Vamos, que es mucho mejor, pero yo no lo hice porque salíamos el día 1 y sabía que no habría nadie en el aeropuerto y, como nunca lo había hecho, pues por si acaso...

¡Qué sorpresita al llegar al aeropuerto e ir al mostrador de facturación! La chica sacó un papelito amarillo que rellenó a mano (la tarjeta de embarque más cutre que he visto y eso que he cogido unos cuantos aviones en mi vida) y nos dijo que eran 10 euros cada uno. Claro, a protestar. Tras un ratito de indignación, la de la ventanilla no sabía ya qué más decir y nos soltó que eso estaba en las condiciones que hay que aceptar para comprar el billete por internet. Y es verdad, no las leímos y, precisamente por eso, no teníamos derecho a reclamar nada.

En eso estoy de acuerdo, la culpa fue nuestra. Pero no tanto, porque en el e-mail no hacía ninguna refencia a que hubiese que pagar si no se hacía el check-in en internet. De hecho, no hay ningún "10" (diez euros) en todo el e-mail. Así que, sí: la responsabilidad de no haber leído toda la documentación era nuestra, pero el tocho que me sacó cuando reclamamos era casi un libro y eso, por mucho que diga, no se lee nadie.

Y por eso, precisamente, empezaba esta entrada hablando de empresas. Una de las tareas principales es lo que llaman fidelización del cliente, para que se sienta satisfecho y vuelva el mayor número de veces posible.

Los cuatro que viajamos nos sentimos muy decepcionados con el servicio prestado y, desde luego, no pensamos volver a coger un avión de suyo. Tienen toda la razón del mundo y han operado de la forma más legal; nosotros seguimos teniendo la sensación de que se nos escondiera información en un párrafo perdido entre una marabunta de epígrafes para que, al no verla y pasar desapercibida, pagásemos más. En otras compañías de vuelos, se avisa de los costes de emisión ce la tarjeta de embarque (que, al fin y al cabo, era eso lo que nos cobraron, tanto al ir como al volver: 20€ cada uno).

Quien quiera, que viaje con ellos; yo, lo que decía antes: una y no más, no me siento nada bien tratado.

miércoles, 7 de enero de 2009

DOS FLORES

Cuando empecé con el blog, lo que pretendía era, más que nada, poner las fotos que iba haciendo. Si alguien se acuerda o echa un vistazo, se dará cuenta de que las fotos de entonces eran casi únicamente de plantas y flores. Después ha ido variando la cosa, según me apetecía. Hoy, tras mucho tiempo, he vuelto a lo mismo con mi querido macro.

¡Qué ganas de volver a tener una reflex...!


viernes, 2 de enero de 2009

DESDE DUBLIN

No s'e si lo comente, pero me he venido a Dublin a pasar el Ano Nuevo. Parece mentira, pero que falte una sola letra puede jugartela a veces. Si os habeis dado cuenta, nouso ni acentos ni esa letra con peineta; es que aqui eso no se lleva. Parece una tonteria, pero que te falte esa letra puede dar por saco un poquito y es dificil decir algunas cosas.

Nos hemos quedado en un hostel; es la primera vez que estoy en un uno y la verdad es que esta bastante bien. Por 6 euroas por noche la habitacion cada uno (somos cuatro), tenemos eso: habitacion, desayuno, internet, billar, futbolin y hasta se pueden pedir instrumentos musicales para tocar y solo tienes que dejar el pasaporte como fianza. Estyo pensando si no pedir una guitarra porque si tocas para los huespedes del hostel dice que te regalan una noche de estancia. Ademas, tambien regalan estancias al ganador de un concurso de fotos que hacen: en todas las habitaicones hay fotos de antiguos huespedes, que las han mandado y, mira, una buena decoracion. Les dire a ver si me regalan un mes y les mando un capazo de fotos, jeje.

Bueno, me voy a desayunar que va siendo hora. Son las 8:30 y esta empezando a amanecer, asi que en cuanto acabemos, nos iremos a dar una vuelta por Dublin.

Ya os contare que tal los pubs irlandeses de verdad...