Vaya dos mesecitos llevo... Además de que no se me vea mucho el pelo por aquí, es que tengo la cabeza en algún sitio y no he conseguido averiguar todavía cuál. En fin, que son épocas en que pasan cosas y a uno se le va la atención hacia donde no tiene que ir. Soy claro como el agua, ¿eh? Bueno, que a ver si poco a poco voy despertando un poquito y le vuelvo a dar movimiento al blog, que lo tengo más que abandonado: nueve entradas en octubre y dos en lo que llevamos de noviembre...
Pero, bueno, hoy pongo un par de fotos que he hecho recientemente. Se me ha roto la cámara que utilizaba hasta ahora, la reflex digital, así que no me queda más remedio que seguir haciendo cosas y experimentando una digital, a secas. Aunque tampoco está nada mal, no hay comparación con la reflex. ¡Ay, cómo la echo de menos...!
Las tres son del mismo día y en el mismo lugar (alrededores de mi local de ensayo). Las dos de antes son cielos (la segunda también, aunque muy retocada) y la última de una libélula muerta en un charco de agua; todo en el polígono industrial que hay cerca de mi casa. Da para más, pero con estoy hay bastante por hoy. Poco a poco...
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