martes, 13 de agosto de 2013

PERSEIDAS 2013

Ayer, como mucha gente, me fui al campo a ver las Perseidas. Algunas pasaron y se dejaron ver, aunque yo esperaba que hubiese más, quizá por haber visto las Leónidas otros años que, si bien son más pequeñas, también hay en más cantidad; al menos, eso tengo entendido. 

El caso es que no iba a dejar pasar la ocasión de intentar fotografiar las estrellas. Lo de las fugaces, directamente ni lo pensé, pero sí quería sacar alguna foto del cielo nocturno como las que he estado viendo últimamente. Intuía que no iba a poder, pero hay que probar las cosas; efectivamente, no tengo cámara suficiente para sacar bien la Via Láctea (cuarta foto), ya que mi cámara alcanza una ISO de 1600 y eso viene a ser una ridiculez comparado con los 12800 que he leído por ahí que se pueden ajustar sin miedo.

Pero no todo fue un fracaso. También desde hace tiempo quería probar la fotografía nocturna con luz, con linternas, para iluminar ciertas partes y darles otros colores. Lo de ayer fue cutre a más no poder porque ni tenía un objetivo bonito cerca, ni llevaba más linterna que el móvil. Aún así, me dio las ideas suficientes para el próximo día que salga a hacer fotos. 

Y una pequeña sorpresa fue la última foto, de un tipo que he visto que llaman "circunpolar", porque el centro que se ve es efectivamente la estrella polar, y las demás giran a su alrededor con una exposición larga. 

En fin, estas fotos sí llevan un retoque muy marcado, en contra de lo que suelo hacer, pero no me queda otra... Aunque si alguien me quiere regalar equipo nuevo... los regalos no se rechazan que es de mala educación.








domingo, 4 de agosto de 2013

AHORA, YA NO

"Ahora, ya no. Ya ha pasado, las olas de la marea pasaron y aquí solamente queda ahora una playa de arena lisa, suave, seca y que se vuela al viento cuando sopla de cualquier otra parte. Ahora ya cambia el tiempo y pasan las tormentas, pasan los minutos lejos de la piel y sale un sol inclemente y cálido que acompaña a la calma.

Ahora, ya no. Ahora las luces ya no reflejan lo innecesario, lo falso de un brillo a medianoche trasnochado por doquier. Los rojos nocturnos y la falta del negro que lo absorba todo, la ausencia de la luna más especial y las noches perdidas en un no saber. Ahora ya no existen esos momentos en que la consciencia se pierde y vuela hacia donde no debe estar, a tu lado, a un instante inexistente que sólo atina a vivir en mi memoria. Ahora, ya no... Ahora, ya no...

Ahora, ya no. No quisiera volver a los lugares comunes, a los tan visitados, a los muertos por olvido y al desperdicio de recuerdos. Y no, la piel ya no se eriza, ya no siente, ya no llama, ya no es la misma de antes y hasta dudo que sea piel. Y no, lo que ha sido siempre, ya no será, perdido en un cúmulo de tiempo que se espesa, que se apelmaza en una imagen insistente a la que no quiero volver.

Ahora, ya no hay nadie a quién mirar."